MasterChef: el llanto del suarense Gastón Dalmau al recordar a sus padres


La vida de Gastón Dalmau es de película. De Coronel Suárez a ídolo teen, enseguida a probar suerte, vivir y trabajar en Hollywood durante siete años, y luego volver y calzarse el delantal de MasterChef Celebrity. Todo eso en tan solo 37 años.

El desarraigo, la lejanía de los afectos en busca de un sueño, un cúmulo de emociones que puede explotar por un detalle, por más pequeño que sea. Por ejemplo, una carta de sus padres.

“Todo lo que te propusiste en la vida lo lograste gracias a tus ganas y a tu garra luchadora. Dale fuerte y cociná como vivís, condimentando la vida y también la comida, llenala de sabores, olores, colores y alegría, siempre siguiendo tus sueños. Te acompañamos en todo y te queremos mucho. Mamá y papá”, leyó el actor con la voz quebrada y los ojos llenos de lágrimas. Y es que ellos siguen en Coronel Suáez. Y aunque estará el que diga que son seis horas en auto no se trata de GPS, sino de un sentimiento que cala mucho más hondo.

El jueves de última chance enfrentó a los participantes a una noche de emociones a flor de piel. Todos recibieron textos como el de Gastón, y para esos destinatarios es que fue pensado, producido y cocinado cada plato de la gala.

Por un rato, el ritmo vertiginoso de certamen se detuvo y dio paso a un cúmulo de historias de vida que le permitieron a las celebridades bajar la coraza, y mostrarse en “carne viva”. Los momentos a destacar fueron varios, pero Dalmau protagonizó el más íntimo al confesar: “Es muy difícil, duele bastante estar lejos”. Los jurados conectaron con él, y esa empatía fue parte de los sabores que lo llevaron a tener el mejor plato de la noche y, por ende, pasar directamente a la siguiente ronda.