El suarense Rollheiser y su otro gran paso: hizo fútbol formal en River
El suarense Benjamín Rollheiser está avanzando de manera firme aunque rápida luego de haber tenido que atravesar una dura primera mitad de 2020. Quedó atrás la lesión ligamentaria y los trabajos a distancia. El delantero de River logró sortearlos como si fueran rivales. Y, a la velocidad que marca el staff físico y médico del cuerpo técnico de Marcelo Gallardo, no deja de ir hacia adelante. Contra Newell’s, de hecho, jugó parte del partido para ir comenzando a fortalecer no sólo su aspecto físico, sino también el mental.
Sus primeros 20 minutos de fútbol formal en casi ocho meses sirvieron para que Rollheiser encare una fase de la recuperación que los especialistas suelen denominar como doble cicatrización. Un período en el que el futbolista debe trabajar para reforzar la confianza al momento del roce, del quite, de la ejecución. Por supuesto que Benjamín además deberá ir ganando paulatinamente ritmo de juego, timing y preparación, todo parte de un trabajo progresivo. Sin embargo, haber tenido rodaje ante Newell’s (relevó a Lucas Beltrán) significó un gran paso para el delantero extremo de 20 años que, por características, podría competir por un lugar en la delantera de River a partir del nuevo esquema 4-3-3 implementado por Gallardo desde el reinicio de las actividades.
Rollheiser había recibido el alta clínica el 25 de septiembre, siete meses después de haber sufrido la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda durante una práctica de fútbol reducido y luego de haber tenido que atravesar una rehabilitación atípica: debido al aislamiento social, preventivo y obligatorio, el delantero estuvo cuatro meses sin poder concurrir a la terapia presencial en el consultorio kinesiológico.
El suarense se vio forzado, entonces, a ejercitarse de manera remota en el gimnasio de su casa, enviándoles videos diariamente al departamento físico del club, además de mantener un contacto permanente con el doctor Pedro Hansing. Una rutina que cumplió de manera estricta y que le permitió, al momento del primer control post cuarentena, dejar tranquilos a los integrantes del staff que lidera Jorge Bombicino: la movilidad de la articulación era buena.
Aunque desde el River Camp son prudentes, el hecho de que Rollheiser ya haya comenzado a incorporarse paulatinamente a los partidos implica un éxito en sí mismo puesto que, dado el escenario de pandemia, se preveía que los plazos de su recuperación fueran algo más extensos. En el club confían mucho en sus condiciones. Incluso su rescisión está valuada en 20.000.000 de euros (River tiene el 85%).
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