Coronavirus en la región: en 30 días hubo el doble de contagios y de fallecimientos que en los seis meses previos juntos
Septiembre finalizó con una estadística alarmante de casos de Covid-19 en la región del Sudoeste: en apenas 30 días hubo el doble de contagios y de fallecimientos por coronavirus que en los seis meses previos juntos. Todas las miradas, sin embargo, se situaron sobre el distrito de Bahía Blanca, ya que los más de 2.500 nuevos pacientes que hubo el mes pasado llevaron al sistema hospitalario a una situación límite.
Los indicadores del avance de la pandemia de Covid-19 en Coronel Suárez y la región mostraron una evolución alarmante durante septiembre. En total, se registraron 4.413 contagios nuevos, cifra que duplica a los 2.183 que se habían contabilizado en los seis meses previos.
El tiempo de duplicación de casos, en tanto, fluctuó durante todo el mes entre 13 y 25 días.
El doctor Fernando Migliavaca, secretario de Salud de Coronel Suárez, dijo que al tener dos terapias intensivas (una para pacientes Covid y otra para pacientes no contagiados), ambas con un importante nivel de ocupación, “el personal se encuentra trabajando al máximo”.
“Tenemos dos médicos terapistas, uno por turno; el resto son médicos que vienen de otros sectores o incluso de Pringles o Tornquist. Esta es una limitación importante”, dejó en claro.
Laureano Alimenti, director de Región Sanitaria I (RSI), informó el delicado panorama durante declaraciones radiales. Señaló que la escalada de casos es “absolutamente preocupante”, advirtió que los hospitales están casi colmados y finalmente reconoció que no se descarta, llegado el caso, derivar pacientes críticos desde Bahía Blanca hacia la región (tal como ocurrió con algunos casos puntuales que fueron a nosocomios del Conurbano).
“Hoy estamos más cerca de enviar pacientes críticos de Bahía a la zona que al revés -se sinceró-. Si seguimos así, el Hospital Penna va a llenarse y vamos a tener que hacer derivaciones a Tres Arroyos, Coronel Suárez o Patagones, o eventualmente a cabeceras como Pigüé o Pringles. En RSI tenemos cinco ambulancias de alta complejidad por si hay que hacerlo”.
El plan de acción contempla, básicamente, que en caso de que la capacidad hospitalaria de Bahía comience a saturarse las otras tres subsedes funcionen, en primera instancia, como centros de derivación de pacientes críticos de distritos vecino.
“Hoy estamos más cerca de enviar pacientes críticos de Bahía a la zona que al revés -se sinceró-. Si seguimos así, el Hospital Penna va a llenarse y vamos a tener que hacer derivaciones a Tres Arroyos, Coronel Suárez o Patagones, o eventualmente a cabeceras como Pigüé o Pringles. En RSI tenemos cinco ambulancias de alta complejidad por si hay que hacerlo”.
“Tenemos dos médicos terapistas, uno por turno; el resto son médicos que vienen de otros sectores o incluso de Pringles o Tornquist. Esta es una limitación importante”, dejó en claro.