Pringles: tras ganar en una rifa, un joven de 18 años abrió su propia carnicería

HISTORIAS

 Gabriel Ocerín, cumplió su sueño de tener su carnicería propia.

Su propietario es el joven pringlense Gabriel Ocerín, quien resultó beneficiado con el primer premio de una rifa y cumplió su sueño de tener su carnicería propia.

En la tarde del día 20 de febrero de este año, en la sede de la Asociación Amigos de la Tercera Edad de esa ciudad, la comisión directiva , junto a Adrián Ortiz, organizadores del evento procedieron a hacer entrega del Premio Final -una orden de compra por $200.000- que fue otorgada al joven Gabriel Ocerín.


El anuncio del premio

Días antes, previamente a esta entrega, en el transcurso del quinto festival de "Pringles Canta y Danza", se adelantó el nombre del ganador, que no se hallaba presente en el lugar, por "estar trabajando", como había señalado posteriormente, por lo que el premio lo tomó de sorpresa.

En esa oportunidad, al ser consultado sobre el destino que le iba a dar a ese dinero, Gabriel Ocerín, expresó: "Si, ya tiene destino. Para lo que lo voy a usar me viene bárbaro. Estoy trabajando en una carnicería en calle 14 y 58, ahora, me voy a comprar herramientas y para lanzarme por cuenta propia. El lugar lo tengo visto y está cerca donde gané la rifa", completó en ese momento Gabriel Ocerín.


"La Rifa"

Cuatro meses después, en plena pandemia, su sueño se cristalizó, al inaugurar su flamante local, muy bien puesto, ubicado en calle Colón N° 454 de esa ciudad, denominado "La Rifa", cuyo nombre da la pauta de su agradecimiento a ese premio de doscientos mil pesos ganados en febrero último.

El joven emprendedor, se mostró feliz por el logro y por haber cumplido una parte de ese sueño: " Logré arrancar. Era lo más importante, tener mi propio comercio. Me costó bastante armarlo, si bien los $200.000 me ayudaron, pero no alcanzaron para completar todo lo que era equipo y herramientas"

Y agregó: "Primero compré las cámaras frigoríficas, y otros elementos. Por suerte, ya tenía conocimiento en el rubro, porque estuve trabajando un año y medio en una carnicería. Así, con ese dinero, más otro dinero que conseguí, y la venta de mi moto, pude completar todo lo que es la base en herramientas para una carnicería y arrancar de cero, que es lo que quería. Si bien estamos en cuarentena, y la gente está complicada, igual lo enfrenté y abrí el local"

Ante la inquietud que nos llamó la atención que un joven de 18 años, utilizara ese dinero para poner su propio emprendimiento, cuando la mayoría, posiblemente lo hubiera gastado en otras cosas, remarcó contundente: "Lo que pasa es que vengo de una familia, donde mi padre, mi hermano, siempre se rompieron el lomo trabajando, que empezaron desde muy chicos y hoy tienen lo que tienen, gracias al empeño, al esfuerzo que pusieron"

"Entonces yo, cuando arranqué en Tres Arroyos, tenía 14 años, no tenía un rumbo fijo, trabajaba en changas, en plomería, albañil, carpintería, hasta los 17 años que llegué a Pringles, el 14 de agosto de 2018".